Entrena, por primera vez, en las nuevas instalaciones
Para el Club Hispano hoy es un día histórico que marcará una nueva época. Es el día en que Juanjo Duque y los jugadores del primer
equipo pisan, por primera vez y en una sesión de entrenamiento, las nuevas
instalaciones de Ferrota.
Atrás quedan muchos sinsabores: unas obras que duraron más tiempo de lo previsto, un incremento del presupuesto que alguien tendrá que explicar, deficiencias notables que están pendientes de resolver y unas condiciones de uso que tampoco están resueltas del todo. Queda trabajo por hacer, faltan explicaciones y que el Ayuntamiento demuestre, de verdad, que apoya a un club casi centenario como el Hispano. Pero ya nos ocuparemos de eso, ahora lo que toca es compartir la alegría de todos los estamentos del club: Presidente, Junta Directiva, Socios, Colaboradores, Jugadores y Cuerpo Técnico, que estrenan casa y es para estar contentos y celebrarlo.
Las instalaciones son nuevas pero el
sitio es el mismo. El sitio era y sigue siendo Ferrota, donde el Hispano vivió
sus mejores días de gloria y cabe esperar que no fueran los últimos, que el
equipo vuelva a la categoría que por historia y por la importancia de
Castrillón y Piedras Blancas le pertenece.
El Hispano y Ferrota, tienen un
balance de 23 temporadas en Tercera División con hitos tan importantes como la
victoria ante el Real Oviedo en este campo. En este mismo sitio se disputaron
dos promociones de ascenso a Segunda B, los años 1991 y 1992, aunque ninguna
con éxito. En 1991, el Valladolid B, el Burela y el Parla pisaron Ferrota. En
1992 lo hicieron Real Madrid C, el Celta B y el Zamora. Fueron los mejores años
del Hispano. También fueron memorables los dos partidos de la Copa del Rey que
el Hispano disputó en Ferrota: en Noviembre de 1990, frente al San Roque de
Lepe, con 300 leperos en las gradas, y en Octubre de 1992 contra el Logroñés
entrenado por David Vidal y con gente como Cleber o Lopetegui en sus filas.
Empieza una nueva época en la que
todos, Directivos, Socios, entrenadores y jugadores, tenemos que arrimar el
hombro y no regatear esfuerzos para que el Hispano ocupe el sitio que le pertenece.